En el momento en que me ingresé y me dijeron que la adicción era una enfermedad, empezó para mi lo que sería el inicio de una nueva vida.
Hice el tratamiento y aprendí a vivir sin consumo alguno. Solo los que hemos sufrido la enfermedad sabemos el agujero negro que llevamos dentro, y que cada vez necesitamos más sustancias tóxicas para poder vivir sin que podamos controlarlo.
Cada día nos prometemos no consumir y sin embargo necesitamos volver a hacerlo una y otra vez. Sólo los que padecemos esta enfermedad lo sabemos.
La OMS reconoce que la adicción es una enfermedad crónica, progresiva y frecuentemente mortal.
Es difícil reconocerlo y más todavía que los padres, los hijos, las parejas y los amigos, que sufren con gran impotencia, comprendan que nuestros comportamientos son síntomas de la enfermedad que debe ser tratada como tal.
Os digo a todos los que estéis leyendo estas líneas, seas enfermo, familiar, o amigo, que aquí está todo el equipo esperándoos para ayudaros a "vivir sin consumir... ¡y además a vivir muy bien!"
"Con nosotros si puedes..."